Trips: Su daño y control

Los trips son una plaga de muchos cultivos agrícolas. Pertenecen al orden tisanóptero y se alimentan de la savia de la planta.

Existen más de 5.500 especies de trips y alrededor de 75 especies de ellos son plagas de cultivos hortícolas. Tienen un cuerpo alargado, su longitud es de hasta 1,5 mm y tienen dos pares de alas estrechas. Su color puede variar entre amarillo claro y negro.

Algunas especies de trips comunes en vegetales y flores:

Echinothrips americanus

Trips de tomate (Frankliniella schultzei)

Trips de melón (Thrips palmi)

Trips de las flores occidentales (Frankliniella occidentalis)

Thrips imaginis

Trips de cebolla (Thrips tabaci)

 

DAÑOS CAUSADOS POR LOS TRIPS

Los apartados bucales de los trips son del tipo raspador-chupador. Durante la alimentación, primero raspan las células y luego chupan los líquidos de la capa superior de células. Por lo tanto, el daño directo causado por los trips incluye puntos de color blanquecino o plateado en las hojas, frutos y flores.

Cuando los trips se alimentan de partes de plantas jóvenes, que aún están creciendo, el daño puede incluir deformaciones de hojas y flores. Esto es un resultado del desarrollo de células que no fueran dañadas, alrededor de las células dañadas por los trips. Vale la pena señalar que cuando aparecen los síntomas de deformación, puede ser que los trips ya no estén presentes.

Los daños directos adicionales causados ​​por los trips pueden incluir frutas pequeñas, caída de frutas y caída de hojas.

Los trips también pueden causar daños indirectos, debido que actúan como un vector para varias enfermedades virales.

EL CICLO DE VIDA DEL TRIPS

Las etapas de desarrollo del trips incluyen huevos, dos etapas de ninfa, pre-pupa, pupa y adultos. La duración de cada etapa de desarrollo depende de la temperatura.

Las hembras pueden poner entre 30 y 80 huevos, depende de la especie, el huésped y la temperatura. Pueden poner huevos dentro del tejido vegetal, debajo de las hojas, dentro de las flores o a lo largo de los tallos. Los trips adultos pueden vivir de 2 a 6 semanas.

MÉTODOS DE MONITOREO

En los cultivos que son susceptibles a los trips, un monitoreo regular es importante para detectar los trips lo antes posible.

El uso de cintas adhesivas azules o amarillas puede ayudar a controlar los trips, debido a que los trips se sienten atraídos por las trampas pegajosas de colores. En invernaderos, se recomienda usar al menos 1 trampa por cada 100 metros cuadrados. Las trampas deben colgarse justo por encima de las plantas y se tiene que inspeccionarlas regularmente.

 

También se recomienda inspeccionar plantas individuales. Se puede sacudir levemente las hojas y las flores sobre una hoja de papel blanco para que los trips caigan a la hoja y puedan ser detectados. Es recomendable usar una lupa para identificar los trips y sus ninfas.

Los trips también pueden detectarse por sus síntomas de daño o signos que dejan atrás. Pequeñas manchas negras, que son los excrementos de los trips, generalmente aparecen junto a los síntomas de daño.

 

CONTROL DE TRIPS

Control biológico – insectos beneficiosos. Cuando la presión de los trips es baja o moderada, los insectos beneficiosos pueden proporcionar un buen control. Los ácaros depredadores, como Amblyseius cucumeris y Amblyseius swirskii, se alimentan de las etapas de ninfa de los trips. El insecto depredador, Orius, se alimenta de todas las etapas del ciclo de vida de los trips, incluidos los adultos.

 

Insecticidas: los insecticidas como el aceite de Neem y la azadiractina pueden proporcionar un control moderado de los trips y generalmente no dañan a los insectos beneficiosos. El espinosad es un insecticida natural que resultó ser muy efectivo contra los trips. Los insecticidas de piretrinas también se usan para controlar los trips.

Los trips suelen ser difíciles de controlar con insecticidas, principalmente debido al hecho de que en la mayoría de sus etapas de desarrollo, esconden en lugares difíciles de alcanzar con la fumigación.

 

Prácticas culturales: múltiples prácticas culturales pueden reducir en gran medida la infestación de trips. Dichas prácticas incluyen la eliminación de malezas, el uso de redes anti-insectos y trampas adhesivas, el uso de mantillo, etc.